La justicia en México opera con la precisión de un reloj (quizás de los que ya no usa Alex Tonatiuh Márquez, alias "Lord Relojes...
La justicia en México opera con la precisión de un reloj (quizás de los que ya no usa Alex Tonatiuh Márquez, alias "Lord Relojes"). Dieciocho años después, la Corte IDH dictaminó que el Estado mexicano fue responsable por la violación y muerte de Ernestina Ascencio Rosario, desmintiendo el diagnóstico oficial de Felipe Calderón, quien había asegurado cínicamente que la indígena murió de simple "gastritis crónica". El exmandatario, al ver la sentencia, solo pudo pensar: "ME ACABA DE DAR GASTRITIS EN MI CIRROSIS" (Rapé).
En el Congreso de la CDMX, el debate sobre la transparencia (que Morena intenta desaparecer para que Clara Brugada pueda nombrar un líder a modo) escaló al nivel más básico de la política: jalones de cabello y gritos entre diputadas. Como diría el filósofo: "Cuando nadie manda, el ridículo gobierna en el Congreso de la CDMX".
Hablando de espectáculos, en el Senado (donde a la cúpula se le destinan $7.1 millones de pesos mensuales para "gastos inherentes"), el morenista Gerardo Fernández Noroña, con su dieta de $126,800 pesos, celebró que ¡por fin! le llegó su humilde Pensión del Bienestar.
A nivel internacional, el péndulo político se mueve, y Ricardo Monreal llama a Morena a reflexionar ante el avance de la derecha en América Latina (como el triunfo de Kast), mientras que gobernadores como Ricardo Gallardo y Samuel García buscan asegurar el futuro de sus cónyuges con la burla legislativa de la "Ley Ruth" y la "Ley Mariana", demostrando que el nepotismo es la nueva moda de la paridad.
Finalmente, México puso aranceles de hasta 50% a productos asiáticos. Marcelo Ebrard, el otrora crítico de Trump, se ha convertido en su "imitador", aplicando la filosofía Groucho Marx de tener principios, pero si no gustan, tener otros. Este movimiento complació a Trump, quien, por cierto, declaró al fentanilo como "arma de destrucción masiva", elevando la tensión y dando excusas para cualquier intervención futura. Menos mal que el peso, ajeno al drama, sigue fuerte.